Para mí, el aprendizaje
cooperativo es de suma importancia, ya que engloba un conjunto de prácticas que
aseguran la auténtica cooperación entre los miembros de un grupo las cuales
permiten que todos los miembros alcancen los objetivos con éxito, a la vez que
brindan la oportunidad de desarrollar numerosas habilidades y actitudes, más
allá de los aprendizajes exclusivamente académicos. El éxito y el desarrollo de habilidades de los
alumnos y el propio, son de los objetivos principales que todo educador debe perseguir.
En mi carrera como
educador he trabajado con ambas metodologías, en la actualidad no me encuentro
frente a grupo pero la experiencia me lleva a inclinarme por el desarrollo de estrategias cooperativas, el aprendizaje es más significativo, favorece lo cognitivo, lo emocional y lo social.
Para trabajar de esta
forma, me he valido de dinámicas de integración y de recursos digitales, lo
cual facilita sorprendentemente el trabajo; además de trabajar en equipos cuyos
integrantes tienen el mismo nivel de responsabilidad en la realización de
actividades conjuntas, de tal forma que puedan aprender unos de otros, se procura
que cada equipo tenga una tarea y
objetivos específicos, teniendo en cuenta que el producto logrado de cada
equipo integrará una sola propuesta final.
Este tipo de estrategia me
ha permitido mantener a grupos pasados interesados, promueve en ellos, el
sentido de responsabilidad, la disciplina, la unión como grupo, y mayor
conciencia de lo que se necesita: ayuda, comunicación e integración de la ayuda
recibida por parte de otros.
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